Los tipos de Voto en México

Los distintos tipos de Voto en los Procesos Electorales

            En el contexto de una democracia, y comprendiendo ésta como una organización social que permite que su ciudadanía participe activamente en su conducción y toma de decisiones,  es en el caso de México que el ciudadano registrado en el Padrón de Electores podrá ejercer sus derechos constitucionales (artículo 35) de votar en elecciones y consultas populares, ser votado, así como asociarse libremente con la intención de formar parte en los asuntos políticos del país, ya sea en partidos políticos o en asociaciones diversas.

Con relación al voto, en nuestro país, podría definirse como el acto  través del cual, el ciudadano  manifiesta su selección ya sea en elecciones populares o en las consultas referidas; y se realiza de manera directa, intransferible, libre, secreto y universal.

Pero en conjunto con la atípica práctica de la política mexicana, surgen de manera paralela distintas tendencias de voto a estudiar, es decir, el voto tiene el mismo valor, pero la inclinación de su preferencia varía por diversos motivos, y para su estudio reciben los siguientes nombres:

o   Voto Útil, ocasionalmente llamado voto estratégico puesto que es considerado de suma importancia al momento de decantar un resultado. El ciudadano que emite un voto útil, suele analizar las posibilidades y en base ello toma una decisión, renunciando en ocasiones a su preferencia electoral y tal cual, utilizando su voto para potencialmente determinar una elección. Para este efecto, hay que tomar en cuenta que dicho sufragio puede ayudar a que el partido político se mantenga en el poder, que la oposición lo sustituya e inclusive la pérdida o  el mantenimiento del registro de un partido político.

o   Voto de castigo, cuenta con mayor relevancia en fechas recientes en el país, este tipo de voto resulta de un elector que siente cierta necesidad de castigar al partido político que lo defraudó o del cual percibió una mala gestión pública, por lo tanto, su elección no toma en cuenta necesariamente a candidatos o propuestas, sino que de manera deliberada vota por la oposición con mayores probabilidades de ganar la elección. Muchos otros manifiestan inconformidad a través de anular su sufragio o abstenerse de ello, pero por su misma naturaleza no puede ser considerado dentro de esta categoría.

o   Voto en blanco, que en realidad termina por ser una vez de abstencionismo, aún cuando de manera doctrinaria podría indicar la no preferencia del elector por ninguna de las opciones, en México donde no existe una segunda vuelta, y no se requiere un mínimo de votos válidamente emitidos para ser electo y resultar victorioso en un Proceso Electoral, este voto en blanco, donde literalmente el ciudadano acude a la casilla y no manifiesta su preferencia por ninguna opción, termina por beneficiar en relación de probabilidad, a los partidos con estructuras electorales mayores (y mayor cantidad de voto duro), puesto que al ser menos sufragios emitidos y ellos tener una cantidad determinada de votos cautivos, su probabilidad aumenta en medida que los electores se abstienen o anulan su voto.

o   Voto duro, se le conoce así al voto emitido por aquellos simpatizantes y militantes por tiempo indefinido de los partidos políticos, los cuales votan sin tomar en consideración a los candidatos, propuestas, gestiones anteriores o condiciones sociales vigentes. El número de voto duro, suele ser proporcional a la capacidad adquisitiva de las prerrogativas del mismo partido político y los ciudadanos que lo emiten son aquellos que buscan un beneficio material inmediato, un empleo  o ser beneficiados por los distintos programas sociales; dicho voto tiene una importancia singular, pues de ser el caso que se presente el abstencionismo en grandes cantidades por parte de la ciudadanía, estos votos cautivos de su partido político, incrementan su valor, a la vez que son diezmadas las probabilidades de que la oposición pueda derrotarlo.

Ejemplo:

En el Padrón Electoral están registradas 100 personas, y los partidos con mayor voto duro son el Partido A con 30 votos duros, el Partido B con 10 votos duros y el Partido C con 5 votos duros (para mantener el ejemplo sencillo excluiré al resto de los partidos). En este escenario, se presentarían los siguientes porcentajes de intención de voto   contabilizando solamente  su voto duro:

Partido A        30%

Partido B        10%

Partido C         5%

Por lo cual, los partidos B y C, requieren de una cantidad significativa de votos para poder conseguir la victoria, sin embargo son votos obtenibles, pues aún se encuentra un 55% de votos indefinidos.

Ahora, de ser el caso que se presente un abstencionismo del 40%, es decir, acorde a nuestro escenario, 40 personas deciden no acudir a votar y solo 60 acuden a las urnas, entonces, las probabilidades se modifican de la siguiente manera:

Partido A        50%

Partido B        16%

Partido C       7-8%

Disminuyendo así las posibilidades reales de que la oposición pueda conseguir el resultado favorecedor, pues solo quedarían 15 votos para "disputar" en la contienda electoral, clarificando así la relevancia del denominado Voto Duro.

Sin embargo, en últimas fechas, surge un tipo nuevo de ciudadano en cantidades significativamente menor, que emite éste tipo de voto, pero pareciera más identificado con las ideologías (y a ello obedece su voto) que a la consecución de un beneficio personal.   

o   Abstención del voto, que es tal cual el no votar, no presentarte a las urnas en la jornada electoral. A través de dicha omisión, el ciudadano en efecto manda un mensaje pero de naturaleza muy ambigua, los cuales pueden ser los siguientes:

¦      La persona es indiferente a la política del país.

¦ Es un ignorante de sus derechos político electorales.

¦   Puede ser alguien que subestime su participación en las prácticas políticas del país y su ciudad.

¦  Es un ciudadano que así muestra su inconformidad con todas las opciones posibles en las boletas.

¦  Por su misma ambigüedad, pueden ser muchas otras y diversas razones.

El Voto es un derecho, así como una obligación de los mexicanos, pero como la Constitución no señala ninguna sanción en caso de no llevarlo a cabo, la sociedad continuamente omite cumplir esta responsabilidad.